Olentzero no ha faltado a su cita con el Parketxe Anduetza. Para dar respuesta al chaparrón de peticiones recibido, hemos conseguido que nos acompañe en nueve días de diciembre. Eso sí, este año está siendo especial: no se quita la mascarilla, al igual que todas las personas visitantes que se acercan; las sesiones se han organizado en grupos más pequeños y para realizar el taller de talo, tras el relato de Olentzero, se está respetando a las unidades familiares, dando una mesa a cada una y manteniendo así las distancias de seguridad.
A pesar de ello, el acto no pierde su magia y el público infantil toma parte encantado. ¡Gracias por vuestra visita!